Concetta Esposito de Díaz *
RESUMEN
Es muy frecuente entre los colegas universitarios no sólo de nuestra Universidad sino de otras Universidades del país, oír la preocupación de que las universidades se deben vincular más estrechamente con su entorno socio económico llámense empresa, industria, comunidad rural o urbana. Esta preocupación surge por diversos motivos: unos impulsados por la necesidad de buscar recursos financieros que permitan financiar parte del presupuesto, otros por la inquietud innata de los mismos investigadores, en aplicar sus resultados de investigación en su entorno y así contribuir a solventar situaciones en la sociedad. Nuestra Universidad no ha escapado de esta tendencia y desde hace algunos años se viene observando una mayor conciencia en este sentido. Diversas son las acciones que se han ejecutado, sin embargo en este estudio queremos reportar las experiencias de vinculación que se están realizando en el Decanato de Ingeniería Civil de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado con el objetivo, además, de sistematizar dichas actividades; básicamente estudiar como se ha venido aplicando y aceptando una propuesta de innovación tecnológica para el sistema constructivo del adobe en algunas comunidades del Estado Lara. Esta experiencia ha sido avalada por el Centro de Investigaciones de la Vivienda de la Facultad de Arquitectura y Arte de la Universidad de los Andes con quienes conjuntamente se ha venido compartiendo esta investigación. Reportar este tipo de vinculación y los resultados que se pudiera obtener es importante por cuanto permite no sólo difundir esta innovación sino también la posibilidad de que pueda ser aplicada en otra nación de América. |
ABSTRACT
It is very frequent among university colleaguer, not only in our own university but in other universities in the country, to hear their concern about universities getting more closely linked to their socioeconomic enviroment this concern is arisen fot different reason such as the need to search for financial sources to cover part of the budget, and the innate anxiety of the same researchers to apply the results of their investigations in their own enviroment thus contributing to solve society situations. Our university has not escaped from this tendency and it has been observed since some years ago, a better conscience regarding this topic. Several steps have been taken; however, in this report we want to disclose the linking experiences that are being realized at the Deanship of Civil Engineering of the Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado with the additional objective to systematize such activities; to study basically the way how it is being applied and accepted, a proposal for the technological innovation to produce sun-dried brick in some communities of the state of Lara, in Venezuela. |
Los cambios tecnológicos así como la etapa de globalización económica que en el mundo se viene dando, de alguna manera ha inducido al hombre y a las organizaciones a revisarse y consecuentemente a modificar patrones de comportamiento y de relaciones. Los actores involucrados en estos cambios son, de hecho, el hombre per sé y el conglomerado de una comunidad en particular, cuando hablamos de una localidad, estado o país, o, en general, cuando nos referimos a los países que conforman la realidad mundial e interactúan en ella.
Decíamos que las organizaciones se han propuesto cambiar sus patrones de comportamiento y con toda razón. Cuando esa organización es la Universidad, siendo su misión entre otras la formación de los recursos humanos que requiere la sociedad, la generación de conocimiento (función básica, que apoyada en la investigación busca la verdad con libertad de criterios) y la extensión (función complementaria que permite penetrar su entorno para comunicar y transferir lo que en ella se genera y se produce) con mayor razón debe estar en una continua revisión de funciones así como una constante asimilación de los cambios que se generen en lo interno y externo a ella. Estos cambios, en lo internos de las universidades han sido lentos: la inercia burocrática y académica, los malos hábitos administrativos adquiridos en la época de la abundancia de recursos del país y la autonomía universitaria mal entendida, frenaron, por decirlo así, cualquier propuesta de cambio que implicara o condujera a nuevos paradigmas. ¿Para qué? ¡Todo esta bien! ¿Por qué preocuparnos?
En contraste a esto, los cambios externos a la universidad: restricciones económicas para los entes de educación superior, la inflación, la necesidad de conservar el status social alcanzado por parte de los profesores universitarios y la globalización económica que ha impulsado nuevos enfoques económicos mundiales, han llevado de una manera abrupta a concientizar, dentro del ambiente universitario, una nueva realidad que amerita una adecuación violenta y acelerada. En este sentido, ha sido necesario, conjuntamente con el quehacer diario, evaluar lo que se tiene y lo que se está realizando, cómo se esta realizando, con qué objetivo se realiza, y qué fin se persigue.
Este preámbulo sirve de soporte al estudio de investigación que se presenta cual es exponer la experiencia de vinculación del Decanato de Ingeniería Civil (DIC) de la Universidad Centroccidental Lisandro Alvarado con la comunidad.
En los actuales momentos a nivel mundial, y específicamente en el mundo académico, es muy común hablar sobre la vinculación universidad-sector productivo, universidad-comunidad, universidad - sector socioeconómico, universidad-industria. Diversos son los autores que han abordado la temática en la que se analizan los pro y los contra, las formas y maneras de vinculación; algunos presentados de forma teórica, otros a través de estudios de casos, en los que se observan experiencias concretas de aplicación. Todo esto ha servido de camino para continuar escribiendo e investigando sobre el tema.
En Europa esta relación comienza a darse en la década de los setenta, pero como concepto estable de relación universidad-industria, solo aparece en los años ochenta. (Waissbluth en Martínez, 1989: p. 55).
Gracias a los avances tecnológicos de información y de intercambio científico, superando los normales éxitos y fracasos de estas relaciones, se ha acumulado cierta experiencia. Se cuenta con literatura en la que se pueden constatar a través de estudios de casos la variabilidad de posibilidades de vinculación, no sólo en Europa sino también a nivel mundial. América no se escapa de esta influencia, pues también se cuenta con libros y revistas que referencian lo que ha ocurrido, lo que esta sucediéndo y vislumbrarse así lo que podría ocurrir, en los próximos años.
De los estudios revisados, muchas son las modalidades posibles de vinculación. La más tradicional, sin costo directo del entorno socio-económico, es la de preparar los recursos humanos en diversas disciplinas, que, al incorporarse al mercado de trabajo, han solventado y continúan solventando problemáticas en áreas como la manufacturera, la actividad social, cultural, habitacional, salud, agrícola, gerencial entre otras muchas disciplinas que en las universidades se imparten.
Otras modalidades están señaladas por Solleiro, J.L. (En Martínez E. 1993: p.409), el autor identifica 17 tipos de vinculación posibles entre la universidad y el sector productivo. Allí se puede observar que la mayoría de ellas están relacionadas a las actividades académicas, de consultoría y de apoyo a la industria a través de pasantías estudiantiles y de personal en año sabático; solo dos de ellas están más intimamente relacionadas con el desarrollo y el resultado de la investigación, como son: el desarrollo tecnológico y la transferencia de tecnología.
Las anteriores modalidades son, por supuesto, el resultado de un cúmulo de experiencias que se han venido sistematizando en el tiempo. A través de la revisión y el estudio de casos, se ha podido confirmar que en sus comienzos la vinculación con la industria, sociedad, o entorno, no fueron iniciativas planificadas por las universidades como parte fundamental de su actividad académica y, por supuesto, ni siquiera se contaba con un presupuesto para facilitar dicha actividad. De hecho, ésta se inició, en la mayorías de los casos, como consecuencia del interés del investigador en conocer o en profundizar en su campo de estudio. Holmes en Vessuri reporta que en algunos casos, las investigaciones realizadas fueron financiadas con recursos del propio investigador, y en otros, éste no se preocupó que las industrias beneficiadas de sus investigaciones no le remunerara por sus aportes. Fue así como se solventaron problemas en la industria química alemana (Holmes, en Vessuri, 1995: p.18).
En el caso de Latinoamérica, la autora (Vessuri 1995: p.19) comenta la contribución de las universidades en solventar problemas de salud pública, de la infraestructura de las ciudades o del desarrollo agrícola en éste último caso refiere el aporte del Ing. Roberto Fernández de Ullivarri (argentino) quien desarrolló una vasta investigación sobre la Caña de Azúcar, sin percibir ningún beneficio adicional a su salario.
En Venezuela, nos reporta Fuenmayor, T.(Conferencia 1996): ... también se han dado aportes en solventar problemas de salud a mediados de la década de los cincuenta cuando, profesores de la Universidad Central de Venezuela (UCV), en el área de la medicina, y el Ministerio de Salud y Asistencia Social, realizaron conjuntamente una gran labor en ese sentido en todo el país.
En ese sentido, también en nuestra Universidad, se recoge la experiencia de los pioneros del Instituto de la Uva con su propulsor, el Ing. Luigi Garassini, en la propagación del cultivo de uva en terrenos tropicales, y la entrega, en 1989, del paquete tecnológico a la empresa privada sin recibir ningún beneficio económico. (Esposito de D. - 1995).Estos investigadores pioneros trazaron los caminos que tal vez aún hoy transitan investigadores que consideran su creación científica un aporte a la colectividad por aquello de que, la Universidad se debe a su entorno.
En lo que respeta a los países industrializados, la gratuidad de los aporte a la colectividad se fue modificando y es después de la Segunda Guerra Mundial cuando la ciencia comienza a recibir significativa proporción del presupuesto público, y el sector privado comienza a realizar grandes inversiones (Vessuri, 1995: p 19).
De hecho, a partir de la década de los cuarenta se comienza a observar cambios, no sólo en los institutos de educación superior, en las que el investigador valora su aporte, sino que también se comienzan a legislar leyes y a aplicar políticas, en apoyo a la ciencia, y a su generación de conocimiento.
Inglaterra se destaca como país pionero en establecer organizaciones que facilitaban el patentamiento y la comercialización de invenciones universitarias y las provenientes de centros gubernamentales de Investigación y Desarrollo (I-D), con la creación en 1948 de la National Research Development Corporation (actualmente British Technology Group). Solleiro, J.L. (en Martínez, 1993).
En Asia, Japón en el año de 1961 creó la Research Development Corporation of Japan (JRDC), y siete años después, en Francia se creó la Agence National de Valoration de la Recherche, en 1968. Estas organizaciones apoyan y reportan beneficios monetarios a las universidades y centros que han generado invenciones, innovaciones y desarrollo de nuevas tecnologías patentables y negociables. Solleiro, J.L. (en Martínez, 1993).
En América, México también estableció una organización similar a los tres países ya nombrados, Mexicana de Tecnología. Sin embargo, razones de desconfianza, en el desempeño, quejas de los procedimientos burocráticos, entre otras, causaron el fracaso de la organización. Solleiro, J.L. (en Martínez, 1993).
Y ya en la década de los ochenta, los Estados Unidos, que financia la investigación a través del gobierno federal, legisló en 1980 la ley pública Nº 96-517 (llamada Bayh - Dole Act) la cual modificó completamente la relación universidad - sector productivo. Ella permite que las universidades puedan beneficiarse económicamente de las investigaciones y desarrollo tecnológico que obtienen como resultado. (Bertha, 1995).
* Profesora Asociada. Unidad de Gestión Tecnológica. Centro de Investigación del Decanato de Administración y Contaduría (CI-DAC), Universidad Centro Occidental Lisandro Alvarado (UCLA).