Tremec-Chrysler: Una experiencia exitosa de innovación

Tremec – Chrysler: A succesful innovation experience

Salvador Padilla Hernández y María de la Luz Martín Carbajal.

2. Evolución Tecnológica

La evolución tecnológica de Chrysler y Tremec es complementaria tanto por sus capacidades tecnológicas, habilidades para establecer contratos e infraestructura para llevar a cabo actividades tecnológicas como por la búsqueda de reducción de costos de producción y la realización de economías dinámicas de escala y aprendizaje. En las dos secciones siguientes se hace referencia a la evolución tecnológica de cada empresa.

2.1 Evolución tecnológica de Chrysler

Las operaciones productivas de Chrysler de México se iniciaron en 1938 con la instalación de una planta de ensamble en la ciudad de México. En 1954 se inauguró, en el mismo lugar, la oficina general de la filial la cual se amplió en 1962. Dos años después la capacidad productiva de Chrysler se expandió al iniciar actividades en la planta automotriz de Toluca en donde se ensamblan automóviles, se fabrican motores, se manufacturan transmisiones y se hacen los estampados metálicos. Además, tiene instalaciones industriales en Saltillo que comprenden una planta de motores, otra de estampados y una tercera de ensamble. En ellas laboran aproximadamente 10,500 empleados, entre ejecutivos, técnicos, administrativos, trabajadores de planta e ingenieros dedicados principalmente al diseño (Véase cuadro 1.1)5.

Las fuentes de la tecnología tanto de proceso como de producto de esta transnacional son de carácter endógeno, puesto que sus innovaciones provienen del laboratorio de IyD, que está bajo el control directo de la corporación; pero, además, las capacidades tecnológicas de Chrysler se acumulan a través de un proceso de aprendizaje tecnológico interno, el cual requiere una base de conocimiento para la formación de capacidades tecnológicas centrales.

En este sentido, Chrysler de México cuenta sólo con un departamento de ingeniería de producto y uno de proveedores el cual se encarga de fijar junto con los éstos los cambios en las especificaciones técnicas de acuerdo con las innovaciones que serán introducidas en los nuevos automóviles para el mercado local e internacional; de intercambiar información y conocimientos tecnológicos, además de resolver problemas técnicos, tarea en la que tiene una estrecha relación con Tremec.

La Chrysler en México no tiene un laboratorio de investigación y desarrollo, aunque cuenta con un departamento de ingeniería de diseño o ingeniería del producto. Además, la empresa tiene un sistema de información de lo más avanzados con que cuenta la industria automotriz que sirve para el manejo eficiente de las diferentes áreas de producción en la compañía: desde el control de los procesos de manufactura hasta la transmisión de datos, sistemas de comunicación, células o programas de producción, entre otros. Este sistema también sirve para intercambiar información con las oficinas centrales de la corporación en Detroit y con las demás plantas de la empresa ubicadas en otras partes del mundo.

2.2 Evolución tecnológica de Tremec

Tremec es una de las principales empresas proveedoras de Chrysler especializada en la fabricación de transmisiones para automóviles en México. Dentro de la industria de autopartes se dedica al diseño, desarrollo, producción, venta y servicio de productos tales como: transmisiones mecánicas de tracción trasera para la industria automotriz; cajas de transferencia para la industria militar; componentes de transmisiones automotrices; engranes de tiempo para motor; transmisiones y componentes para la industria agrícola, además de partes de repuesto para las transmisiones (véase cuadro 1.2).

De acuerdo con los ejecutivos de la empresa en el período 1964-1980 Tremec estimuló la formación y fortalecimiento de su base de conocimiento y aprendizaje tecnológico pues invirtió en el aprendizaje de la comercialización y distribución de sus innovaciones; instauró nuevos métodos de aprendizaje para innovar procesos y productos; e implementó nuevas formas de administración y organización para planear las estrategias competitivas y hacer frente a las exigencias del mercado mundial. De esta forma la compañía creció de manera continua empleando sus habilidades en exportación, mejoramiento de los sistemas de comercialización, distribución, servicio a clientes y refacciones, con base en el conocimiento de las necesidades de los clientes mexicanos y extranjeros incrementando el número de clientes tal como se observa en el cuadro 1.3.

En 1980 el mercado mundial automotriz cambió radicalmente sus estrategias pues tanto en ingeniería como en calidad Europa y Japón eran alternativas probadas para los mercados americanos. En este sentido, la fabricación de transmisiones no fue la excepción, pues cambiaron los diseños, se redujeron los límites de ruido permisible y el esfuerzo de cambios de velocidad. Estos cambios, o el diseño de las partes internas del automóvil obedecían a las relaciones interactivas y nuevas rutinas organizacionales y productivas establecidas entre Tremec y sus principales usuarios como Ford, Chrysler y General Motors, entre otros.

Además del cambio en las estrategias de las empresas europeas y japonesas, durante el primer lustro de los años ochenta, se transformó el enfoque de los usuarios quienes buscaban un fabricante de transmisiones que también tuviera la responsabilidad en la ingeniería y el desarrollo de los productos y, como consecuencia, el desarrollo de nuevos procesos de producción. Por estas razones desde 1981 Tremec comenzó a diseñar y desarrollar sus propios productos, de tal manera que en 1991 lanzó al mercado la primera transmisión con diseño 100% mexicano, aunque desde 1987 Tremec desarrolla innovaciones de proceso y producto como se puede observar en la evolución de la trayectoria de la tecnología de manufactura de la empresa (véase cuadro 1.4).

Por otra parte, el laboratorio de IyD de Tremec, además de resolver los problemas en las transmisiones realiza investigaciones aplicadas que permiten crear tecnología para nuevos desarrollos. Por ejemplo, el ruido de los engranes en la transmisión es un problema, y de acuerdo con las nuevas estrategias mundiales del sector automotriz dicho laboratorio analizó la forma de eliminar o disminuir esos ruidos trabajando con diferentes tipos de geometría y distintas clases de engranes hasta llegar al óptimo.

Con frecuencia para innovar algún producto hay que hacerlo con un proceso que no existe, por lo tanto, durante la fase inicial de producción de un nuevo artefacto también hay que crear un proceso para fabricarlo. Esto significa que existen innovaciones de procesos que dan continuidad a la innovación en la empresa. Por ejemplo, para fabricar un engrane de dos piezas se necesitaba soldarlo con un rayo de electrones y lograr así un engrane compacto. En este caso, Tremec realizó innovaciones en las manufacturas para introducir nuevos procesos que ofrecían algunas ventajas para la fabricación del nuevo producto. Lo anterior es un ejemplo de cómo el soporte de las rutinas productivas y organizacionales en la empresa está constituido por un conjunto de prácticas y reglas organizacionales tácitas y/o explícitas que delimitan las pautas de comportamiento e interacción de los actores (Villavicencio, 2000).

Al analizar la relación de proveeduría entre Tremec y Chrysler se encontró que a pesar de que dicha relación no está exenta de la incertidumbre provocada por la información incompleta para enfrentar tanto las fluctuaciones futuras en la demanda de mercado, como los cambios en las especificaciones técnicas derivadas de las innovaciones incrementales en procesos y productos que ocurren en la industria automotriz, existe cierto grado de certidumbre en la relación tecnológica y de proveeduría ya que la duración de los contratos es normalmente de cinco años. Aunque en el mercado mexicano la permanencia de un modelo de automóvil puede ser de un año, incluso de menos tiempo, las transmisiones no necesariamente cambian de un modelo a otro. Por lo tanto, un contrato de mediano plazo otorga a las firmas cierto nivel de confianza acerca del cumplimiento mutuo de los compromisos contraídos con grandes compañías.