Lilia Pereira de Homes y Wendolin Suárez Amaya
Desde finales de 1999, la Dirección del Centro se propuso impulsar significativamente el quehacer investigativo a través del desarrollo de una serie de estrategias conducentes a alcanzar, tal como se señaló anteriormente, el incremento de la productividad científica; la adscripción de docentes a la investigación y el incremento de la generación de relevo. Estas estrategias fueron:
a) Captación de docentes
El proceso de captación es entendido como «el conjunto de técnicas y procedimientos orientados a atraer candidatos potencialmente calificados» (Chiavenato, 1999:208). Esta fue una tarea que realizó la dirección del Centro a partir del último trimestre de 1999 en la Escuela de Administración y Contaduría Pública; tarea que según Gamboa (2002) fue ardua dado el escepticismo existente entre los miembros del personal docente en cuanto a la investigación.
A tal efecto con la intención de despertar el interés o motivación de los docentes a incorporarse a la labor investigativa se procedió a divulgar en los eventos de la Facultad y en las reuniones de los departamentos los beneficios que ofrece la actividad de investigación.
Como resultado de este esfuerzo se logró incrementar significativamente el número de profesores dedicados a la investigación, de 12 que existían para el inicio de la gestión en 1999, a 65 en 2002. La incorporación de un amplio número de profesores, tanto de esta Facultad como de otras, entre ellas, Arquitectura, Humanidades, Ingeniería, Ciencias Jurídicas y Políticas, Núcleo Cabimas y de otras universidades e instituciones de la región como son la Universidad Rafael María Baralt, la Fundación Fe y Alegría y la Central de Cooperativas del Estado Zulia. Esta integración ha fortalecido los espacios de las discusiones teóricas y empíricas relativas a las ciencias sociales y por consiguiente la calidad de la docencia.
Finalmente, el incrementó del número de profesores en la investigación posibilita la incorporación, con financiamiento del Consejo de Desarrollo Científico y Humanístico (CONDES) de personal de apoyo.
b) Incorporación de profesionales y estudiantes financiados por el CONDES
La incorporación de personal financiado por el CONDES en calidad de asistentes, auxiliares y colaboradores, son figuras creadas para brindar apoyo al investigador, a su vez este personal adquiere y profundiza, conocimientos, habilidades y actitudes, a través de la formación que a diario recibe tanto de los miembros que conforman el equipo de trabajo como de las lecturas y discusiones de materiales teóricos-metodológicos, con lo cual se constituyen en personal potencial de relevo en formación.
Ahora bien, se puede incorporar por cada proyecto un asistente (Profesional con título de cuarto nivel), o un auxiliar (Profesional con titulo de tercer nivel) y un colaborador (Estudiante de Pregrado) (CONDES, 1999), con lo cual se ha venido dando participación al estudiantado y a profesionales recién graduados con vocación para la investigación.
Actualmente el Centro cuenta con el siguiente personal de apoyo financiado por el CONDES: 10 colaboradores, quienes son estudiantes de Pregrado de las carreras Economía, Administración, Contaduría Pública y Sociología que ofrece esta Facultad; 30 auxiliares, profesionales recién egresados, en su mayoría de esta Facultad, algunos de ellos han recibido financiamiento para cursar estudios de Maestría5; y finalmente, 1 asistente con título de Maestría. Esta Facultad según datos del año 2001 tiene el mayor número de estudiantes incorporados como colaboradores en proyectos de investigación financiados por el CONDES6.
Aun cuando no es un requisito explícito del CONDES exigir un promedio igual o mayor a quince puntos para incorporar a un profesional o estudiante en algún proyecto, dicha exigencia se ha convertido en política de algunos investigadores del Centro. Esta medida ha sido impuesta por la realidad, en virtud de que en el momento de solicitar financiamiento al CONDES para la asistencia a eventos y/o pago de matrícula de este personal, se exige tener este promedio.
De la misma manera, el ingreso a LUZ está supeditado al promedio (Reglamento de Ingresos y Concursos Universitarios, Reglamento de Ingreso y Formación de Becarios Académicos). Se evidencia entonces que formar un estudiante o profesional en investigación con un promedio menor a quince puntos puede convertirse en un esfuerzo con pocos resultados, pues las posibilidades de hacer carrera académica en LUZ son limitadas.
c) Aprovechamiento de financiamiento externo para nuevos ingresos de personal
Ante las dificultades de tipo presupuestario que enfrenta la institución, el CEE ha aprovechado las oportunidades de financiamiento que brindan la Fundación para el Desarrollo Académico Integral de la Universidad del Zulia (FUNDADESARROLLO) y el Fondo Nacional de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (FONACIT) para la formación de recursos humanos en investigación.
A través de FUNDADESARROLLO se incorporaron al Centro en la gestión 1999-2002, 3 profesionales bajo la figura de becarios académicos quienes deben cumplir unos requisitos adicionales a los exigidos a los becarios académicos financiados por LUZ, como es concluir los estudios de Maestría en esta universidad en dos años, o dos y medio incluyendo los seis meses de prórroga.
De acuerdo con Pereira y Ochoa (2002), el hecho de que la Maestría se realice en LUZ pretende lograr el fortalecimiento de los postgrados e identificación del becario con la institución, evitando así la fuga de cerebros. Otra de las exigencias de ese organismo es que el tutor sea un investigador activo y que publique con el becario, condiciones que apuntan a garantizar la productividad científica de este personal en formación.
Con respecto al aprovechamiento de financiamiento que ofrece FONACIT a través del Programa del Investigador Novel (PIN), se facilita el ingreso y permanencia en universidades y centros de investigación y desarrollo del país de jóvenes venezolanos con formación de postgrado para promover el desarrollo de la investigación; fortalecer las líneas de investigación activas en el país; ampliar la capacidad de los grupos de investigación establecidos y fortalecer la capacidad docente universitaria.
La figura del investigador novel ha sido poco difundida y por tanto desaprovechada por la comunidad universitaria. En el CEE no se había utilizado hasta 1999, tal vez por desconocimiento, por falta de interés de quienes lo dirigían, o por no contar con suficientes investigadores de trayectoria. Hasta mediados de la década, la comunidad científica en el campo administrativo sigue reducida a su mínima expresión, el personal de investigación en el CEE es el mismo que ingresó desde finales de los setenta, sin que se esté formando la generación de relevo (Ochoa, 1995:68).
En virtud del esfuerzo dirigido a la incorporación de docentes a la investigación con titulo de Doctor, se ha ido conformando un equipo de investigadores activos, muchos de ellos acreditados en el Programa de Promoción al Investigador (PPI)7 y reconocidos por la Comisión para el Beneficio Académico (CONABA)8 quienes tienen la posibilidad de asumir la tutoría de becarios académicos, hecho que ha conducido a la incorporación de cinco investigadores noveles en el Centro.
d) Formación teórica-metodológica
La discusión teórica-metodológica que se ha venido generando de manera sistemática en los equipos de investigación, es una estrategia fundamental que despierta en el investigador inquietudes, reflexiones y actitudes frente a diversas concepciones epistémicas y métodos de investigación. A partir de ello se estaría en mejores condiciones para abordar con mayor profundidad cualquier problemática a desarrollar en el campo de las ciencias sociales.
Las dinámicas de las discusiones en los programas del Centro se realiza por lo general cada quince días donde participan los integrantes de cada equipo de trabajo, incluyendo en esa discusión al personal de apoyo. Esta estrategia convierte al Centro en una escuela de investigación. Destacan Salavarrieta et al (1998) que el desarrollo del talento humano en las dependencias académicas de la universidad es una actividad que debe ser propiciada por los Jefes, Directores o Decanos y Autoridades Rectorales para el crecimiento profesional y personal de sus integrantes.
El apoyo recibido por parte de investigadores de amplia trayectoria ha incrementado considerablemente la productividad científica reflejada en artículos publicados, ponencias nacionales e internacionales, asesorías de tesis a nivel de Pregrado, Especialización, Maestría y Doctorado, acreditaciones de investigadores en el PPI, así como en la formación de personal de relevo tal como se demuestra en el cuadro del siguiente apartado.
Adicionalmente para el apoyo teórico-metodológico los investigadores también cuentan con una unidad de documentación cuya función es la sistematización y difusión de la productividad científica del CEE. También tienen a su disposición en la biblioteca de la División de Estudios para Graduados una colección de más de doscientos treinta números de revistas arbitradas, obtenidas por canje a través de la Revista Venezolana de Gerencia (RVG).
e) Conformación de equipos de trabajo
El aprendizaje en equipo implica la práctica permanente sobre la base de la discusión y el diálogo (Senge, 1992:297), lo cual requiere que exista integración entre sus miembros para crear los resultados que se aspiren alcanzar. De acuerdo con esto, en el CEE se han conformado equipos de trabajo en función de las líneas y programas de investigación, cuya finalidad es generar discusiones plurales y compartir esfuerzos para el aprendizaje colectivo.
A través de esta estrategia se generan espacios de discusión para que los integrantes de los equipos discutan los resultados de sus investigaciones que han sido presentados en eventos científicos nacionales e internacionales, con lo cual se cumple el requisito exigido por el CONDES de divulgar en la comunidad científica los resultados de las investigaciones financiadas por este órgano. Así mismo, los miembros que conforman los equipos de trabajo divulgan información sobre los eventos futuros, cursos y seminarios que guardan relación con el desempeño académico.
Esta estrategia ha creado en el CEE una cultura investigativa, la cual se manifiesta en la productividad científica generada en los últimos años y en el reconocimiento que ha merecido de otras comunidades científicas a lo interno y externo de la institución, ha permitido atraer investigadores de otras Facultades fortaleciendo de esta manera la interdisciplinaridad, condición necesaria para abordar desde diferentes perspectivas los estudios propios de las ciencias sociales. Siguiendo a Marcano (2000:2) «El personal formado en estos ámbitos actúa como una onda expansiva difundiendo los conceptos y visiones que se tienen desde el propio centro de investigación».
En esencia, la formación permanente a través de la vivencia del trabajo colectivo y de la conformación de equipos de trabajo para el quehacer investigativo es la alternativa más expedita de dirigir esfuerzos hacia la conformación de una masa crítica que actúe con mayor pertinencia en la realidad social.